+Tu
¿Dan? ¿Es tu novio?
-Noo.
Es mi amigo pero a mi me gusta un poco.
+¿Y
por que no querías que me acercara a... Jorge?
-Por
que yo estoy enamorada de Jorge.
Me
quede flipada con esa noticia. Quiere a uno y se va a por otro.
+Si
lo quieres, ¿por que vas a por.. Dan, no?
-Pues
porque, mi familia y la suya son muy amigos y yo lo conozco desde que
eramos niños. Y según mi padre es el que mas me conviene.. Ademas,
¿que hago contándote a ti mis cosas?
+No lo se, yo solo te e preguntado.
+No lo se, yo solo te e preguntado.
-Me
inspiras confianza. Me caes bien. No se por que, pero espero verte
pronto.
Parecía
que la bruja, no es tan bruja. Se notaba que era buena persona. Lo
único malo que yo veía en ella, era que quería ser mas que nadie.
-Una
cosa.
+Dime.
-Ten
cuidado con Silvie. Si crees que yo soy mala. Espera a conocerla a
ella. Cuando la veas aléjate de Jorge de verdad. Ella no es igual
que yo.
+Esta
bien, y ¿como sabre quien es?
-Tiene
el pelo castaño oscuro, y los ojos negros. Y siempre lleva la sombra
de ojos oscura. Casi siempre la lleva negra o gris.
+Esta
bien. Gracias.
-Bueno
me voy, chao.
+Adiós.
Entonces,
si ella no es la mala. ¿Quien es la mala?
Cogí
unas partituras y puse rumbo a la sala de música. Me apetecía tocar
le piano.
Iba
ya por la mitad del camino, estaba leyendo las partituras y me
tropecé con alguien y se me cayeron todas las partituras. Y encima,
como las ventanas estaban abiertas se me volaron algunas.
+¡Vaya!
Alguien
se agacho y me dio partituras.
-Toma,
estaban allí. Son tuyas, ¿no?
Levante la cabeza, vi a un chico de pelo castaño, ojos grises y bastante guapo. Quería hablar pero no me salían las palabras. Hasta que salieron.
Levante la cabeza, vi a un chico de pelo castaño, ojos grises y bastante guapo. Quería hablar pero no me salían las palabras. Hasta que salieron.
-¿Son
tuyas?
+Mm..
Si. Gracias.
-Soy
Dan.
+Alex.
Así
que este es Dan. Yo también dejaría al chico que quiero por el.
Bueno tal vez no.
-¿Eres
nueva, estudias aquí?
+Si,
he entrado este año.
-Eso
es que eres buena. Son muy exigentes.
+Jaja,
gracias. Supongo.
-Si,
es un alago.
+Pues
gracias.
-¿También
tocas el piano?
+Si.
-¿Con
que nota has entrado?
+100%
Se
quedo con una cara, un poco rara.
+¿Que?
-Sabia
que tenias talento. Eres transparente. Se te ve todo lo que sientes
en la cara.
+Así,
y dime que mas ves en mi cara de mi.
-Vas
a la sala de música. ¿Te acompaño y te lo digo?
+Esta
bien.
Comencemos
a caminar. Me dijo que en mi cara veía a alguien fuerte, tolerante,
y con mucho carácter. Pero que a la vez era sensible y una persona
que se hacia querer. Que era una persona que sabia escuchar y que no
era una chivata.
-Bueno
ya estamos.
+Vaya,
cuantas cosas me ven en la cara. No sabia que llevaba el testamento
escrito.
-No,
no llevas nada escrito en la cara.
+Bueno
mejor me entro que seguro que tienes muchas cosas que hacer mas
importantes.
-Me
ha gustado platicar contigo.
+Hasta
luego.
Entre
a la clase de música estaba vacía, vi el piano y comencé a tocar
las partituras. No me concentraba. Era como si en mi vida hubiera
tocado el piano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario