Capitulo 62.

+Me encanta la habitación.

-En cuanto mi madre supo que venia la niña, preparo esta habitación.

+Pues me encanta esta habitación.

-Vamos a ver la siguiente.

+Si.

Salimos de la habitación. Cruzamos al otro pasillo. La primera de la izquierda era la de sus padres. Era una habitación normal con la cama debajo de la una ventana. En morada y plata.

+Bonita.

Y la siguiente, la suya. Lo mejor para el final, ¿no? Una habitación bonita. En azul oscuro y claro. La cama esta en la pared izquierda, en frente una televisión colgada en plata. En frente un ventanal. Que se veía el jardín con piscina.

-Pasa.

El se sentó. Yo me asome al ventanal. Le hice un gesto de si podía salir. Me dijo que si. Salí. Habían unas vistas bonitas un bosque. No tarde en notar como unas manos abrazaban mi cintura. Sonreí. Me di media vuelta sin que el me soltara.

-¿Te gusta lo que has visto hasta ahora de mi casa?
+Si, es bonita. Con secretos.

-No entiendo.

+Que abajo es muy rustico y arriba modero.

-Ah, y no te olvides de las comodidades.

+Si, no os falta nada.

Se echo a reír.

+¿En realidad te llamas Daniel?

-Si.

+¿Y por que te llaman Dan?

-No lo se muy bien. Pero es que creo, que a mi padre le gusto Dan. Y los padres de mi madre querían Daniel. Así que mi acta de nacimiento pone Daniel, pero me dicen Dan.

+Todos satisfechos.

-Aja.

+Me gusta tu habitación.

-Es sencilla. No quería que fuera muy cargada.

+Pues esta genial.

-Si, ¿vamos a cenar?

+Si.

Bajemos abajo. Pasemos al comedor. Los hermanos de Dan ya estaban ahí.

-Bueno, ya estamos. Ven siéntate.

Me senté a su lado enfrente nuestra estaban sus hermanos.

*Haber muchachos, enseguida mando traer vuestra comida.

La nana se marcho, y enseguida trajeron los espaguetis a la boloñesa.

Terminemos de comer y pasamos a un salón de lectura. Allí nos trajeron un plato de tarta de chocolate con un vaso de leche. Sus hermanos subieron arriba a jugar, dijeron que preferían tomarlo en la sala de juegos. En el salón estábamos Dan, su nana y yo.

+Mm, esto esta muy bueno.

-¿A que si? Mi nana, prepara la mejor tarta de chocolate del mundo.

*Ay, tampoco es para tanto.

+De verdad esta muy buena.

Terminemos de comer, vinieron a por los platos y empecemos a hablar de cosas. De como va el colegio, si estábamos estudiando...

-Ahora vengo.

Dan salio de la sala.

*Señorita, quiero decirle algo.

+Si, claro.

Me senté a su lado.

*Daniel, es un niño muy especial. Y si te ha traído aquí, es por quede verdad te quiere.

+¿Como sabe usted eso?
*Por que a parte de que llevo aquí muchísimos años, porque que el mismo me lo dijo. Me dijo que cuando trajera a la casa una muchacha, seria por que de verdad el sentía que la quería.

+Yo también lo quiero. Y mucho.

*Eso me alegra, señorita. No quiero que sufra.

+Are todo lo que este en mi mano. Pero no solo depende de mi.

*El para mi es como un hijo mas.

+Estoy segura de que el también te quiere mucho.

-Oye, ¿vamos? Ya es tarde.

Asentí. Salimos a la puerta, baje antes que el. Escuche como su nana le dijo: 'No la pierdas es una buena muchacha, vale la pena. No pude evitar sonreír.