-¿Que
te ha entrado?
Me senté en váter, tire de la cadena y abrí la puerta. Con solo verme supo lo que me pasaba. Se arrodillo ante mi.
Me senté en váter, tire de la cadena y abrí la puerta. Con solo verme supo lo que me pasaba. Se arrodillo ante mi.
-Gorda,
tienes que...
+Ni
se te ocurra decirlo. Suficiente que me opere ya.
-Pero...
+No,
por favor.
-Ven
aquí anda.
Me
dio un abrazo me sentía muy mal.
-Anda
vamos afuera.
¿Afuera?
Ala, todos me han visto hacer el cuadro. No, no quería salir.
+No.
No, no voy a salir. Me han visto hacer el ridículo.
-No
pasa nada, solo estamos nosotros aquí arriba. ¿Solo te han visto
estos? Vamos.
+No...por
favor.
-Pero...
entonces ¿que hacemos?¿Te quedas aquí hasta que vayan a cerrar?
+Si,
es buena idea.
-Mira
voy a fuera a ver que dice Hugo...
Salio
mi prima afuera. Y entro mi tío.
-¿Que
te pasa? ¿Otra vez? Tu ya sabes lo que tienes que hacer, no te lo
voy a repetir. Ya eres mayorcita, enana. Anda, vamos afuera.
+No.
He hecho el ridículo. Si casi me mato y todo.
-Nadie
lo sabe, solo Tati, tu y yo. Decimos que te ha sentado mal la comida
y ya.
+No
se lo van a tragar.
-Solo
estamos nosotros aquí arriba. Hoy es domingo. Suelen comer todos
adonde las abuelas, tías...
Me
miro y le sonreí.
-Venga,
vamos.
Me
dio la mano y salimos. Me iba empujando, yo no quería salir.
+Tengo
hambre.
-Ahora
comes.
+Si
se supone que me ha sentado mal.
-Pues
te comes solo el helado y te compro otro también.
+Vale.
Me
senté otra vez en la mesa y empuje la bandeja hacia delante, como
haciéndole asco.
Dan
me miro, ya eran tres veces las que me habia pasado esto con el. Le
dije que no me pasaba nada y siguió hablando con los amigos de mi
tío.
Terminamos
de comer y nos fuimos. Abajo todos se despidieron de mi, sabían que
me iba. Los conocía a todos. A los 10. Manu, José, Iván,
Christian, Fran, Xavi, Borja, Víctor, Alberto y Kike. Y mi tío.
Rabian cosas del fútbol que yo no entendía. Como, si solo son once
por que llevan el numero veinte o quince. Pero me lo explicaron, era
porque los números los elegían los jugadores. Cosas raras.
+Tati,
no te vienes.
-No,
voy a donde Cris.
+Sabes
que me voy hoy, ¿no?
-Si, ¿a que hora te vas?
-Si, ¿a que hora te vas?
+A
las siete y media tengo que estar allí.
-Pues
a las seis voy a tu casa, ¿vale?
+Vale,
no me falles eh.
-No.
Yo
iba un poco mas adelante que mi tío y Dan. Ellos iban hablando.
Bueno mas que hablar mi tío le estaba 'explicando' a su modo las
cosas.
-Mira,
ella. Es todo para mi. Es como una hermana, una hija. Aunque sea mi
sobrina. Y no quiero que le pase nada. Ni que le hagan daño. Así
que, cuidado con ella.
+Yo
no le haré daño nunca.
-Bueno,
pero a ver al ser su novio, hay cosas que....
+No
soy su novio.
-¿No?
+No.
Escuche
como Dan rió.
-Bueno,
igualmente. Cuídala.
+Eso
esta hecho.
Se
estrecharon las manos y entremos a mi casa. Eran mas o menos las
cuatro y cuarto de la tarde.
Mi
tío se hecho en el sofá y yo y Dan subimos a la habitacion a hacer
las maletas
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