+No
se como empezar.
-Pues,
¿por que no por el principio?
+Ya,
pero es que no se si hubo principio entre tu y yo.
-Si,
que lo hubo.
+Pues
yo no se cuando. Pero si se cuando va a acabar, y es ahora.
Me
levante y me acerque al borde de la piscina.
-Un
momento.
Se
levanto, yo me eche un poco hacia detrás y el se puso delante mía.
Empezó a parecer personas que se sentaron en las mesas.
-¿Me
estas dejando? ¿Tu a mi?
Me
agarro de los brazos. Me estaba haciendo daño.
-A
mi no me deja nadie.
+Suéltame
me haces daño.
-No
te suelto. Tu no me vas a dejar, nunca.
+Suéltame,
me estas haciendo daño. Mucho daño. Déjame.
-No.
Tu vas a estar conmigo.
+¿Después
de que te has liado con mi mejor amiga? Lo tienes claro.
Le
pegue una patada donde puede y después lo empuje a la piscina.
-Me
la vas a pagar.
+Tu
ten fe. Que es bueno.
*Muy
bien.
Gin.
Amigas de las que ya quedan pocas. Las dos nos echemos a reír.
Pedimos permiso para salir y nos fuimos. Compremos unas palomitas y
fuimos a un parque. Estuvimos hablando, le conté lo que habia
pasado.
-¿En
serio te agarro?
+Si, por eso le pegue. Y lo empuje. No iba a dejar que, ese, me hiciera daño.
+Si, por eso le pegue. Y lo empuje. No iba a dejar que, ese, me hiciera daño.
-No
se como me pudo gustar.
+Por
que es guapo y esta bueno.
-Si,
tienes razón.
Nos
echemos unas risas y nos fuimos otra vez al colegio.
Gin
fue a por algo de su taquilla o no se que. Yo fui para la habitación.
Antes de girar, escuche como Dan y Jorge... No se explicarlo.
-Jorge,
¿que mas da?
*¿Que
mas da? Esa a mi no me va dejar así. La ultima palabra la voy a
tener yo. Eso te lo aseguro.
Me
reí por dentro. No iba a tener esta vez el la ultima palabra. Esta
vez seria yo. Gire.
+Si
eso es lo que quieres, adelante habla.
*¿Como
te has atrevido a tirarme a la piscina?
+Estabas
muy... furioso. Te vino bien bajar tu temperatura corporal.
*Tu...
No
le salían las palabras. Me reí, esta vez en su cara.
+¿Que
pensabas? ¿Que te ibas a reír de mi? No, bonito. Esta vez te la han
jugado a ti.
*Me
la vas a pagar, te lo juro.
+Si,
claro por que no.
Se
fue, como... ¿Como dirían las mayores? Ah, si. Como alma que lleva
el diablo.
-Ya
se la has pagado.
+Te
lo dije. No iba a quedarme quieta. El que la hace, la paga.
Me
dirigí hacia la habitación pero me llamo.
-Te
invito a cenar.
Una
sonrisa salio de mi boca.
-¿Aceptas?
Me
di la vuelta, me agarro de la mano y me miro a los ojos.
-Bueno,
no me respondes... Me voy.
Se
dio la vuelta.
+Acepto.
Se
volvió a girar.
-¿Si?
+¡Si!
+¡Si!
-¿Pues
donde quieres que cenemos?
+Pues,
no se... Donde tu quieras.
-Vale,
pues... Vale, ya se. Quiero llevarte a que conozcas a una persona
especial.
+Vale.
-A
las nueve y media en la fuente. Yo voy a hablar con la directora.
Me
fui a la habitación. Eran las ocho. Me di una ducha, me planche el
pelo y cuando volví a la habitación ya estaban las chicas. Les dije
que me iba con Dan a cenar. Ellas eligieron mi ropa, me pintaron y me
pintaron.
Ni siquiera yo, sabia como iba.
Ni siquiera yo, sabia como iba.
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