lunes, 7 de enero de 2013

Capitulo 32.


+Sabia que me pasaba algo, y se ha presentado aquí para ver como estaba.
*Le gustas. No solo porque se haya presentado aquí, sino por su mirada.
+Ya lo se. Y el a mi.
Habrá un armario saque el cola-cao, lo cerré. Habrá otro cogí un vaso de plástico, lo cerré. Habrá un cajón, cogí una cuchara, lo cerré. Eche cola-cao en el vaso.
*Una cosa. ¿A ti no te gustaba otro? Moreno. Creo que hasta me dijiste algo de amor.
+Si bueno la historia es así. Yo estaba con Jorge, su amigo. Yo lo quiero a Jorge. Pero es un cabrón. Me quería poner los cuernos con mi mejor amiga, Gin.
*¿Gin? ¿Quien es Gin?
+Ya te contare. Bueno pues, Gin y yo tenemos un plan. Pero es que a mi me gusta Dan, me encanta Dan. Y me he besado con el.
*¿Entonces, la cosa como esta?
+Anda vete ya hablaremos otro día.
*Vale pero me lo tienes que contar todo.
+Que si.
Salimos las dos de la cocina.
*Adiós Dan, hasta pronto.
Hasta luego, le respondió con una bonita sonrisa. Tati estaba a punto de salir cuando...
*¿Donde vas a dormir? Si quieres puedo decirle a mi madre que si te puedes quedar en mi casa.
-No, me quedo aquí. Valeria, ya me esta preparando la habitación.
*Vale.
Tati puso una sonrisa forzada. La acompañe hasta la puerta, hasta afuera.
+¿Que quieres con el?
*Nada, solo soy amable.
+Tati, que no soy tonta.
*Bueno, tu estate alerta. Que puede cambiar de gustos.
Se dio la vuelta. Me hizo gracia. Me reí.
Entre a mi casa, y cerré la puerta de la calle. Mi madre justo bajaba por las escaleras.
+¿Y Dan?
*Se esta dando una ducha.
+Ah, vale. Estoy abajo.
*Vale.
Mi casa tiene tres plantas. La primera planta, la de abajo, conforme entras de la calle tienes las escaleras a la izquierda que da el comedor. Sigues recto y queda a la derecha una puerta que baja a un pequeño sótano donde es una sala de estar mía. A la izquierda un baño. Y recto la cocina, nada mas entrar a la cocina, a la izquierda una pequeña galería.
En la segunda planta, conde terminan las escaleras, a la izquierda mi habitación. Recto quedaba un baño. A la derecha del baño estaba la habitación de invitados. Y la derecha la habitación de mi madre.
Si seguimos subiendo las escaleras quedaba la ultima planta. Donde al subir entramos a una especie de buhardilla con un sofá, televisión, cama y baño. Toda la pared de la izquierda es una cristalera que da a una terraza bastante grande.
Baje abajo. Era una sala de estar con un futbolín, televisión grande, una play y un par de juegos.
Me senté en el sofá, me puse a pensar un rato en todo lo que habia pasado en esos... ¿que? ¿Dos meses? Acababa de ser mi cumpleaños. No pude evitar ponerme algo triste, y se me soltaron un par de lagrimas.
Mi tía para mi era como una madre. Lo sabia todo de mi. Me aconsejaba.
Era mucho para mi.
Me seque las lagrimas. Y subí para arriba. Mi madre estaba poniéndose una chaqueta.
*Oh, cariño. Me voy, ¿vale?
-Esta bien.
*No vendré a cenar. Toma dinero.
Me dio 20 euros.
*Pide una pizza o algo. Lo que quieras.
Me dio un beso y me dijo que me quería.
-Yo también. Adiós.
No se muy bien lo que acababa de pasar pero guarde los 20 euros en una caja y subí para arriba. Cuando termine de subir las escaleras Dan salia del baño. Me quede petrificada. ¡Vayaaaaaa! Quería decir pero no, me quede callada. No sabia yo que tuviera ese cuerpazo. Si que se notaba que jugaba al fútbol.
-Alex, ¿estas bien?
Reaccione.

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